Son todo un arte y un reto, además de entretenimiento adictivo, casi un vicio.
¿Amigos, a alguno de ustedes les gusta esta vaina?
Un rompecabezas, también denominado en inglés puzzle, es un juego de mesa cuyo objetivo es formar una figura combinando correctamente las partes de ésta, que se encuentran en distintos pedazos o piezas planas.
En 1762, el diseñador de mapas londinense John Spilsbury hizo uno casi por accidente. Montó uno de sus mapas en una hoja de madera, y del corte alrededor de las fronteras de los países usando una sierra marquetry fino-aplanada, comenzó, sin querer, la historia de los rompecabezas. El producto final resultó un pasatiempo educativo, diseñado como un asistente para enseñar geografía a los niños británicos.
Un siglo más tarde, Milton y McLaughlin Bradley (la hoy famosa marca Milton Bradley) comenzaron a fabricarlos en serie.
7 comments:
Bah.
El comentario que puede esperarse de un huno, un vandalo, un barbaro, no de un poeta laureado.
A diferencia de la gran mayoria, los rompecabezas que hago, me suelen tomar hasta diez dias en armarlos,
me tomo mi tiempo, y voy a mi paso, sin presion de tiempo.
Quien lo diria, hoy en dia, los rompecabezas, crucigramas, sudoku, etc, son parte activa de la terapia en pacientes diagnosticados con Alzheimer.
Aldo, me referia precisamente a esos, los que pones sobre una mesa y completas en semanas.
Solo un erudito elitista, modesto y casi casto, como COQravines puede despreciar un placer como este.
Nunca he comprendido cómo se puede perder tanto tiempo en armar un rompecabezas. En ese tiempo puedo leer a 4 poetas, relatos o una novela, ver dos películas o meterme dos polacos. O incluso conversar, vino de por medio, con amigos sonre política, literatura y otras cosas (menos de futbol porque tampoco le halló sentido a comentar como algunos individuos corren detrás de una pelota). La vida es breve, más breve cuando se es viejo. Yo prefiero sumergirme en tiempos de ocio en medio del lago de la belleza del arte.
Por eso jamas comprenderas el placer del ajedrez y el goce intelectual que conlleva.
La ignorancia es atrevida, y en el caso de MelCOQchita, arrogante al maximo.
Lamento decir que ese argumento falaz lo he escuchado de gente profundamente inculta: porque pierdo tiempo escuchando musica clasica o jugando ajedrez. Gente ignorante, incapaz de sensibilidad alguna.
La opinión de COQ es prueba de que los extremos se juntan: de un lado los refractarios a la cultura, del otro los elitistas supremos, ayatolas de la verdad. No sorprende que ambos grupos se encandilen con "una mano fuerte" que los oriente en la vida.
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