3 July 2012

Un mundo para Julius

Reconozco haber errado en mi opinión.  Dos veces intenté leer esta novela, dos la abandoné: la primera en mis tiempos de la UNI, la segunda en los 80s.

Ha dormido en mi biblioteca por más de dos décadas y ahora, a la tercera oportunidad (terminé de leerla el sábado pasado), me doy cuenta que es un libro de calidad, una crítica frontal a la huachafería, banalidad y racismo criollos.


Un mundo para Julius es la novela más popular del escritor peruano Alfredo Bryce Echenique, del llamado "post-boom" de la literatura latinoamericana.

Escrita mayormente durante su estadía en París, fue publicada en 1970 en Lima, y participó en el Premio Biblioteca Breve de 1970, sin obtener mención alguna.

La novela es una mirada crítica, mordaz y ocasionalmente burlona a la clase alta limeña y evidencia las diversas características de la Lima aristocrática de esa época, como la elegancia, la hipocresía, el racismo y la división de clases sociales, entre otros temas.


Me gustaría saber que piensan ustedes, darlings.

16 comments:

Carlos Orellana said...

Dice Yehude:
"Ladran Sancho, señal que avanzamos, (y COQimori es el que más ladra).
Me injuria y calumnia mientras duermo las maltas (Glenlivet) de ayer, pero despues de desayunar un par de vodkas, estoy de vuelta en la joda."

Como será este gran puta de ladino, que siempre responde lo mismo: se escuda, se esconde tras el bosque de botellas de su solitaria mesa, de su mesa de bebedor empedernido y consuetudinario, de dipsómano irreparable, de vicioso sin remedio y serio aspirante a la AAA.Pobre hombre, toda la cultura anglosajona que ha ganado, muy meritoriamente, en la IBM de USA y NZ, la echa a perder por su condición de huarapero tercermundista, irresponsable y caradura.
Y no añado más a su imagen deteriorada por el vicio, porque recien estamos a principios de julio y todo este mes espero sacarle las mierda.
Por mi madre que nunca olvidaré el sonoro "Viva el APRA" del judío. Y ya cuando estabamos con un pie en la calle, de pronto sorprendió con una adhesión al "Presidente Mao". Miren a este rechúchesumadre.

Carlos Orellana said...

Gran novela peruana, una de las mejores del siglo. Una encuesta de los 90s la situó como la favorita de los lectores. Junto a El mundo es ancho y ajeno y La ciudad y los perros son las mayores novelas peruanas.
Sin embargo luego ha escrito novelas intragables como "No me esperen en abril" o esta última, dela que he leído un fragmento en La República. Un bodrio total, una imitación triste del tono de García Márquez. Nunca entenderé cómo un narrador excelso puede caer luego a estos niveles.

Moshe said...

Que honor el coincidir con el laureado de ébano en mi opinión sobre esta novela. Este hijo de Moisés no es tan bruto, ni tan basto como lo parece.

"Nunca entenderé cómo un narrador excelso puede caer luego a estos niveles."
Claro que puedes. Tu, el mismo COQ que escribió 'La canción del mal amado' fue capaz de pergeñar los discursos del nipón. Capisci, Fantomas?

Carlos Orellana said...

Esa novela es una macha en mi biografía. Mis amigos me dijeron que era un esquema y que no la publicara, pero yo fui muy torpe.

Aldo said...

Carajo ! Encontre el gallinero de Joda Criolla alborotado, nuestro gallinazo de Chacra Rios metio picotazos a diestra y siniestra hasta cansarse.

Despues de leer el testimonio del Poeta, donde dice que nunca monto bicicleta,
volo cometa, bailo trompo, salto lingo, jugo mundo, me pregunto : Que chucha hacia Coqcito cuando era chico ?

Lo unico que queda es pensar que el morocho era fiel e inseparable de Manuela de la Palma desde temprano.

En cuanto al Tio Johnny, lo recuerdo como un tipo querendon, con carisma, y buena voz.

Al morocho lo recuerdo en el colegio, siempre con saco, lo que le daba una imagen de Tio, probablemente para pasar piola, cuando incursionaba por Paruro.

No sera, que el laureado se esta quitando la edad, y ya esta en sus 68 ?

Vamos Tio, confiese de una vez.

Moshe said...

Tu obra literaria/propagandística es prueba fehaciente de que es posible transitar de lo sublime a lo deleznable.

Carlos Orellana said...

Cuando era chico ya dije que jugaba a otras cosas. Tenía mi carrito de madera con rodajes tirados del almacén de Transportes. Seguro que ustedes no han hecho carrera con esos carritos que se empujaban, carajo. Y era campeón de ñoquitos y me gustaban juegos como ir en patota a patear las puertas de fierro plegables de los negocios por las noches (Chacra Ríos era un barrio de emprendedores y estabn juntos residencias y negocios). Cuando llegaba la Navidad y el Año Nuevo jugaba con algo peligrosísimo: me agenciaba tubos doblados, los tapaba por un lado y por el otro le introducía arena gruesa y pólvora de cohetones desarmados. Era un arcabuz de a putamadre. Como ven no jugaba huevadas. Yo mismo era. Así, mi querido Cachete de Nalga, infancia y niñez he tenido. También me iba en patota a los cines a joder desde la cazuela.

Carlos Orellana said...

SAlvo el pastor. que viene de un barrio popular, y GT de otro como yo, Cachete y el judío vienen de barrios clasemedieros sin mucha bulla.

Moshe said...

Mi familia era, es, de clase media como el resto de nsotros. Solo algunos empresarios emprendedores tenían la guita (y la suerte) tuya, aedo.

cvalqui said...

Como dice el Poeta "No jugaba huevadas" "Yo mismo era", no fue un palomilla del monton, siempre fue cabeza de banda, por estas virtudes de pubertad, sobresalió en la decada del 90.
Mis respetos, Poeta.

Moshe said...

"Yo mismo era.'
Qué arrogancia la de este huevón, el poeta. Desde chibolo ya era la mamá de Tarzán, el capo de capos, virtudes de líder indiscutido, que, como bien dice Carlitros, sacaría a relucir en la honesta década del noventa.

Algunos somos humildes, otros no.

Aldo said...

Mi querido cafe expresso (negro, amargo, y caliente), para todo hay gustos, asi como usted no concebia como once huevones podian entretenerse corriendo detras de una pelota para patearla, sin embargo se vacilaba pateando puertas metalicas con sus patas, una prueba mas que el gusto no tiene dueno, nadie esta equivocado morocho, simplemente que usted es un sapo de otro charco y marcaba la diferencia.

Lo importante es que vivio con lo que lo hacia feliz, asi que no se me achore, que le puede subir la presion.

Moshe said...

Aldo, Carlitros, Mario, Vittorio: han leído esta novela?

Mario Pablo said...

Estimo a Bryce por su literatura testimonial, sólo él, porque vivió dentro del monstruo, podía desvelar el perfil de la clase dirigente, fracasada y bestia de nuestro desgraciado país; jamás tuvimos feudales ilustrados o mecenas, menos capitanes de empresa, nos gobernaron lacayos, mayordomos, válidos de los invasores, latifundistas bestializados y rentistas disfrazados de capitalistas, y, como si fuera poco, la clase gagá, los supuestos blancos, racistas, nunca entendió el Perú y su sentido de nación o patria brilló por su ausencia, para conocer esto nada mejor que Un Mundo para Julius; infelizmente nuestro Bryce la recag... plagiando artículos ajenos ¡por qué? no lo entiendo, imagino que lo hizo estando huasca.
COQleóptero, qué puedes comentar sobre Bryce, ilustranos, pues, jijuna monín

Aldo said...

Pirincho, lei el libro dos veces, ese, y En Octubre no hay Milagros, son los unicos libros de Bryce que he leido.

Libros de lectura facil y entretenida que te envuelve con sus relatos

Aldo said...

Lapsus Brutus, el aleman hizo un amago, guarda ahi, En Octubre no hay milagros, es de la cosecha de Reynoso, no de Bryce.