3 November 2011

Magia

David Copperfield es el indiscutido actual maestro del asunto, aunque para magos me quedo con El Padrinísimo Vladimiro, quien hizo desaparecer cientos de millones de dólares, que hasta hoy se siguen buscando.

La magia o ilusionismo es un arte y espectáculo de habilidad e ingenio, que consiste en crear artificialmente efectos maravillosos mientras se desconoce la causa.  Estas desapariciones, transformaciones, lecturas de mente, etc, que hacen parecer realidad lo imposible, se conocen como trucos de magia.

Dentro de la magia hay diversas especialidades: fantasistas, prestidigitadores, escamoteadores y reyes de la evasión, que protegen sus trucos con el compromiso del secreto profesional.

El más célebre mago y escapista de todos los tiempos fue Henry Houdini, quien creó una serie de ilusiones basadas en el arte del escape. Vean su foto abajo.

A finales del siglo XX, el ilusionismo volvió a tener auge gracias al extraordinario David Copperfield y sus especiales televisivos, espectáculos en Broadway y giras internacionales.

Por favor díganme que les parece el truco del video que incluyo.


16 comments:

Carlos Orellana said...

Judío, a ver díme, ¿qué hacias en el Cinco y Medio? ¿Jugar ajedrez? Si de entrada el guachimán te decía: ¿Sí?. Y después te pedía tu libreta electoral. ¿Por que no cuentas eso?
Es que tu hasta las 30 años y después has sido Baby Face, judío. Por eso el Chaplin de Care Duende.

En nuestra clase no hubo rubias, pero después la vida hizo surgir algunas rubias mariposas de la noche.

Aclaro: yo no tengo nada contra los blancos, negros o amarillos. Me encantan las rubias porque eso es natural en los zambos y morochos, se busca el contraste. Nada más.
En cuanto a los blancos y blanquiñosos peruanos creo que ellos mismos padecen del hecho de ser nosotros un país con mentalidad colonial, desde el Virreynato los "blanquitos" creen que han nacido para formar parte de una capa superior de la sociedad peruana, lo cual es una candidez. Hoy los cholos provincianos con plata son una nueva burguesía y eso tienen que aceptarlo los descendientes de os gachupines. Esta es una forma implacable de democratización de la sociedad peruana. Por cierto que toda etapa de transición tiene también sus bemoles y el hecho de la emergencia de los cholos empresarios y profesionales supone un cierto auge de la mala educación y el mal gusto. Pero como decía el gran Julio Ramón Ribeyro (un verdadero pensador, no como el rotulador VLL) hay que expropiar también las buenas maneras de la burguesía. Eso tomará algún tiempo, pero será realidad. Por lo pronto tendremos que soportar la frase más popular de nuestros días: "Uno con su plata manda".

Moshe said...

El color de piel no interesa, mi querido COQ.

Cholos, zambos, chinos, ponjas (que tanto te gustan), blancos, todos estamos hechos de lo mismo. Lo que nos diferencia son la educación y la inteligencia.

El 5 1/2 me trae muy buenos recuerdos que, al igual que tu con tus días en Palacio, consignaré al papel en el futuro.

cvalqui said...

Poeta aprende, hasta de viejo no terminas de aprender, ya vienen las historias de Moshe en el 5 y 1/2, va pa´ la PEÑA.

Esto se pone BUENO y dice así "El 5 1/2 me trae muy buenos recuerdos..."

Aldo said...

Uno por uno van cayendo, y el proximo clavado de 100 metros seguramente sera del hermano Mario Pablo, quien debe tener sus calentados de aquella epoca pajiza.

En cuanto al Quimico, estreñido deustuano segun COQ, se esperan tambien sus tapaditos.

No se si recuerdan el "Miami", era otro paraiso que estaba muy cerca del Aeropuerto.

Carlos Orellana said...

Reto a Care Duende a que escriba en varios capítulos la historia de sus visitas al Cinco y Medio, al Miami (ya Patrimonio Monumental) y algunos telos que según el y su imaginación fueron escenario de su fogosidad hebrea. Como bien dice Pulgoso, va pa la peña.

Carlos Orellana said...

Habla, Fantomas

Moshe said...

Nunca he sido figureti como tu, querido laureado.

Carlos Orellana said...

Claru, claru, con el sexo no eres figuretti, nomás con la huasca. Y ya vieeeenneee, Las botellas y los hombres, novela de Julio Ramón Pederewski.

Mario Pablo said...

Queridos veteranos, reconozcámoslo, somos de la época que no había suficientes telos para fornicar, con las justas el 5 y medio ofrecía catres para cuerpos ardientes; las amigas o trampas eran tan recatadas que hundían la cabeza en los hombros para que nos las vean ingresar en los autos; los juegos amoriles tenían horario y pasarse del plazo costaba; los putescos espejos en el techo y las paredes, y el olor a desinfectante, me imagino nunca dejarán de dar vueltas en nuestras cabezas, mayores y menores. He dicho

cvalqui said...

Mario Pablo en sintesis ha dado en el clavo, cuando menciona que las acompañantes de turno que llevabas en TAXI al 5 1/2, se escondian en el hombro del varón, para que no la vea algún conocido.

Recuerdo el Pasaje Santa Elena (5 1/2); cerca estaba "Las Violetas", que el turno era por dos horas y despues te tocaban el timbre, porque habia gente que hacia cola, para entrar.

Con relación al otro aspecto "los putescos espejos en el techo y las paredes, y el olor a desinfectante...." hasta la fecha persisten en algunos hoteles, lo percibo cuando estoy de supervisión, en el interior del pais.

No hay que descuidarse, Mario Pablo le pisa los talones al Poeta.

Mi querido MOSHE, tiene todo el tiempo del mundo para contar sus anecdotas, Poeta no presiones, todo cae por su peso, no te vayas a sorprender que MOSHE sea un eximio copulador. No es figureti.

HE REDICHO

Carlos Orellana said...

Tienes razón, Químico, pueda que lo esté presionando. Care Duende ya hablará y entonces es posible que estemos ante un Rubirosa Israelí y yo tenga que callar. Todo es posible en la dimensión hebraica.

cvalqui said...

A calzón quitado se puede afirmar que, luego del análisis concreto de la situación concreta, queda en limpio que el Cinco y Medio no era accesible a la gente del común. Porque para ponerse bajo su buen recaudo había que disponer de movilidad. Entonces, era solo para los privilegiados. Esto lo había calculado con astrolabio Manuel Novella Trabanco. Quienes tenían coche podían conseguir amante y enrumbar hacia el naciente. Los desheredados de la tierra debían conformarse con una meretriz fugaz y con tal fin dirigirse hacia el poniente por la fatigada avenida Argentina, derechito al Trocadero. Manuel Novella Trabanco estableció las antípodas a sabiendas.
Sea como fuere, por su olfato histórico y experto en el árbol de la ciencia del mal, Manuel Novella Trabanco tiene, en el Perú, más méritos que Alberto Fujimori. Aun el presidente Alan García tendría que hilar fino y enmendar rumbos para quedar mejor pintado que el orquestador del Cinco y medio

Aldo said...

Poeta, dejelo respirar al hebreo, el hombre ya eyaculo y admitio que fue un regular contribuyente del " 5 1/2 ".

Eso si, podria haberle pasado por la cabeza al
semita, meterse un polvo jugando una partida de ajedrez.ex

El morocho por su lado, pisaba fuerte por el pisto,
con las fichas que manejaba en el bolsillo en esa epoca, era el doble de Don Pedrito, " Rico y Sabroson ".

Como todos, el vate tambien tuvo sus dias de misio (cuando vaciaba el bolsillo), y muchas veces llego al " 5 1/2 " en micro.

Carlos Orellana said...

Se ve a la legua que el Químico ha sido Trocadicto, habla con conocimiento de causa y hasta con inspiración poética. Sin Cachirulo: mis respetos por esa parrafada de limpia y serena prosa, digna de un escriba bien dotado.
Y volviendo al tema, supongo que el Troca merecerá algunas líneas suyas, mi querido Pulgoso. Le pido que recuerde a alguna caserita.

Carlos Orellana said...

Mi querido Simio Sudaca: antes del 2000 nunca he estado misio; después del 2000, el diluvio, ekl desempleo y todo. Ya este año me estoy reponiendo. Pero le diré que
en cuestiones de foqui, qué no habré hecho. En 1980 me compré un Mustang que vendñi en 1993 o 1994; ese auto fue testigo no solo en la Costa Verde, sino en algunas calles de Jesus María de fornicios que ahora al paso (quickly)que muchas veces desafiaban la ley de la gravedad y la constitución del Estado. Qué épocas, compadre Maquisapa.

cvalqui said...

Poeta, el Troca en el año 1970, lo habre visitado unas dos veces, fui con unos amigos de barrio.

Sincero, escuchaba mucho del Troca que cuando lo visité no fué gran cosa. Recuerdo que se pagaba un Ticket de 10 soles, aparte del dinero que le dabas a la femina por el servicio.

Si bien escogí una colorada, el tiempo me jodió, a los 10-15 minutos ya te decian hasta aqui nada más, sino vuelves a pagar otro servicio.

Poeta, este santuario de placer supongo que habrá tenido el alto honor, de tenerlo entre sus clientes PREDILECTOS.

Cuentese, alguna anecdota.