18 August 2014

Pappardelle

Como dice COQcaviar: a meter diente.
 
 
Pappardelle es una especie de fettuccine ancho, de dos a tres centímetros de anchura, cuyo nombre deriva del verbo pappare, engullir en italiano.
 

6 comments:

Carlos Orellana said...

El kurdo ocioso ha encargado a alguien que ponga post. No puede llevar una modesta notebook y laptop y comunicarse día a día como lo hice yo durante 25 días; él que es el rey de la tecnología. Para criticar y llamar ociosos a otros si es bueno, en eso no ha dejado de ser peruano. Salud, Pikachu.

Mario Pablo said...

Púchica, ahora Coq, además de poeta, es adivino, cómo churchill sabe que no frecuento la poesía, probablemente un escritor., un literato tenga licencia para no interesarse por otros conocimientos humanos,el derecho por ejemplo, la astrofísica,también, pero un abogado, que no quiere quedarse en la condición de picapleitos tiene el deber de cultivarse y abrazar las humanidades, de modo que, estimado Cocoroco, tu repudio por las declamaciones no es santa palabra, ni el resto de la humanidad tiene que compartirlo. En mi caso, modestamente, abogado de a pie, recuerdo, como si fuera ayer, que el profe Janampa, cursábamos primaria, me dijo, como a otros, tienes que salir al frente y recitar, cantar o bailar, por esto leí los Heraldos Negros de Vallejo, quedé impactado, traté de entender esas palabras fortísimas, las aprendí de memoria y recité orgulloso ante mis compañeros, ese pequeño acto consolidó mi amor por la lectura, literatura y cultura

Carlos Orellana said...

Chapla, no me atrevo a hablar de derecho, menos a debatir contigo de esa materia porque sé que podrías darme lecciones magistrales. Reconozco mi ignorancia del modo más firme. Por lo mismo reitero mi conocimiento de la literatura puesto que durante todos los días de mi vida, desde que tengo uso de razón la he frecuentado. Cuando estaba en el colegio leía a autores muy mediocres y no solo los leía, sino que los ensalzaba (Díaz Mirón, Amado Nervo y ect.) Mas adelante al finalizar el colegio podía admirar como tú el poemas más popular de Vallejo, pero no el mejor como es Los heraldos negros, poema de impronta modernista que el propio Vallejo no estimaba porque formaba parte de su 'edad de `piedra'. Un verdadero lector de poesía no quedaría 'impactado' por ese popular poema de juventud. Vallejo es complicadísimo y no está al alcance de lectores que no tengan previa formación literaria. El gran Vallejo está en Trilce y Poemas Humanos, verdadero aporte a la poesía en todas las lenguas. Si conoces realmente de poesía peruana debes haber leído a Martín Adan, A Emilio Adolfo Westphalen, a Jorge Eduardo Eielson, a Carlos Germán Belli o a Rodolfo Hinostroza (estos últimos para quienes conocemos algo de literatura dos futiros premios Nobel, pues se encuentran entre las mayores voces de la poesía de hoy a nivel mundial, y . fíjate, de todo tengo menos de nacionalista). La poesía contemporánea, como todo arte contemporáneo es un arte 'feo' y difícil, que requiere descifrar ciertas claves. No es que estos poetas la pongan difícil para el populacho o que sean elitistas, el arte tiene su propia dialéctica y no hay peor artista que el que piense crear para que lo entiendan las mayorías. Lamentablemente el gran arte no es sino para quienes teniendo sensibilidad deben además cultivarse. La mejor novela del siglo XX es, según la casi unanimidad de la crítica mundial, Ulises, de James Joyce. Es una novela que no a entiende ni tu abuela ni la mía. Menos la de el kurdo zarrapastroso.

Mario Pablo said...

Querido coquimbo, gracias a San Marcos los pinches de abogado y políticos, pudimos aprender de grandes maestros y revisa las diversas bibliotecas del campus, incluida la de Letras, de manera que lo leído en primaria y secundaria, sobre literatura, se robusteció en la U. Tengo muy claro lo que decían Washington Delgado y otros maestros, no olvide y siempre me acompaña la sensación que generaron en mí Martín Adán, Whestphalen, Eielson y Belli. Hinostroza no me dice nada, además de su pedantería ya conocida. con Vallejo sigo pensando que el gran arte también es para las mayorías, que su bondad no está en los laberintos en los que se pierde sino en la fuerza de su comunicación y el efecto que produce en el mundo subjetivo del lector

Carlos Orellana said...

Las uvas le deben estar recitando al kurdo sus poemas. Cuando el euroasiático se mete en un parral hay que sacarlo con policía, parece una plaga: la filoxera o un hongo.
-Señor espere que las uvas maduren y que sean cosechadas-le dicen.
Pero el sacerdote de Baco arrasa con los racimos.
-Yo mismo las proceso-responde.
La visita de Pikachú a la Emilia Romagna sin duda será materia del recuerdo. Allí la gente toma vino para acompañar la comida, por placer o para celebrar, pero el kurdo toma vino para ahogarse en alcohol, para celebrar a Baco y por el puro gusto de joder.

Moshe said...

El negro injurioso no deja de meter palo en ausencia de este sobrio hebreo. Las lecciones de su padrino, el Doctor, nunca se olvidan.