28 March 2014

La Cara de Cojudo

La Cara de Cojudo (Sofocleto)


No lo digo con espíritu chauvinista pero el peruano tiene cara de cojudo como resultante de dos grandes motivaciones: a) porque es un cojudo auténtico y su rostro es la expresión natural de la cojudez que atesora en el cerebro, o b) porque es falso cojudo, infiltrado en las filas enemigas.

Creo sinceramente que los cojudos son felices.  Hacen cojudeces, hablan cojudeces, piensan cojudeces y tienen una vida tan cojuda que nada les podría envidiar una ostra.  Pero esa misma cojudez innata le impide examinar objetivamente su problema y hasta, en algunos casos, juro que los he oído reírse de algún pendejo, por ahí. 

Yo tuve un primo cojudo que murió cuando reparaba su televisor sin haberlo desconectado previamente.  Se trataba de un caso incurable, porque era cojudo de nacimiento, pero vivía feliz.  Los problemas le importaban un carajo y los dramas de la vida cotidiana le resbalaban, al extremo que llegué a preguntarme si mi primo no sería un pendejo navegando con bandera de cojudo.  Sin embargo, no lo era.  Digo, un pendejo.  Porque su cojudez tenía el sabor fresco de las cosas puras y a su cara de cojudo no le faltaba sino la aureola para recibirse de santo en la familia.  

Un día hice una cojudez, deliberadamente, para ver qué pasaba. Luego hice otra y después una tercera, sin que el experimento me afectara mayormente.  Pasé a vivir entre cojudos con la intención de escribir un libro sobre ellos pero a los veinte días los cojudos escribieron, entre todos, un libro sobre mí.  Confieso que esto me sumió en un mar de dudas.  ¿Era yo un pendejo entre cojudos, o era un cojudo entre cuatro pendejos?  No tenía manera de averiguarlo y decidí mirarme en el espejo para discutir el punto conmigo mismo.  Bueno, me encontré con la más perfecta cara de cojudo que he visto en mi vida.

Se dice que la nuestra es una sociedad disolvente, como los ácidos y los antipáticos (obsérvese cómo, cuando algún antipático se acerca al grupo, el grupo se disuelve o se licúa ipso facto).  Yo diría, más bien, que vivimos en una atmósfera acojudante, espesa y plomiza, donde el clima juega, sin duda, un papel importantísimo en la fabricación de cojudos al por mayor.  Contra el clima no se puede, porque no hay ser humano capaz de enfrentarse victoriosamente a enemigos tan inasibles como la humedad de la Costa, que nos acojuda con el reumatismo; la inestabilidad de la Sierra, que deja cojudo al metereólogo más despierto, y las lluvias de la Selva, que son una cojudez solamente comparable con el Diluvio.

De otra manera resulta inexplicable de que sí se jodieran impajaritablemente los incas, los españoles, los libertadores y los republicanos, por la vía de hacer cojudeces tan catastróficas que hasta hoy no terminamos de levantar cabeza.  Yo, sinceramente pienso, que si alimentásemos a una computadora con todo lo que constituye la anécdota, lo absurdo, lo increíble, lo Cojudo, vamos, de nuestro pasado, dicha computadora volaría en mil pedazos o emitiría una respuesta indignada, que diría algo así como: "¡No jodan... ese país no existe!". También podría volverse loca y seríamos el primer país del mundo que tuviera un IBM en el manicomio.

No hay ex-cojudos aquí, así como no hay excusados en Masutolandia.  Tampoco los habrá nunca (ni ex-cojudos ni excusados) porque ningún pendejo perfeccionaría una droga para curarlos, así como ningún cojudo tendría la necesaria lucidez para descubrirla.  No, cojudos habrá siempre.

9 comments:

Carlos Orellana said...

Estoy aquí después de mucho tiempo, y no sé por cuánto tiempo. No me ha motivado volver a escribir aquí lo que se ha escrito contra mí, so ridículo pretexto de joda. Eso me tiene sin cuidado. No los considero agravios, sino expansiones inexplicablemente pueriles. Llamó mi atención sí que al revisar (lo hago cuando puedo y en busca de novedades, cosa que casi siempre me decepciona porque he leído los mismos chistes y etiquetas decenas de veces) me di con varios anónimos y con la creencia de que soy el autor de los mismos. Soy el único en el blog que ha firmado con su nombre y siempre ha dado la cara.
Finalmente rindo homenaje a la amistad a prueba de balas de todos (excepto yo) que hace soportable la repetición de una temática hasta casi la nausea y el vómito. Esos son amigos. Mis congratulaciones.

cvalqui said...

Esta reaparición si que trae cola, aparece como el ave fénix, de las cenizas. Un efusivo abrazo y apretón de manos al indescriptible Poeta.
Este acto de vuelta al BLOG lo pinta de cuerpo entero, "parece" que esta libre de rencores y resentimientos.
Le digo Poeta que hasta en las grandes familias, siempre hay diferencias de conceptos e ideas y no es motivo para alejarnos, somos una familia deustuana.

Tenorio said...

Reapareció temporalmente el laureado poeta, lástima que no lo hace amigablemente sinó con furia acusándonos de escribir cojudeces y además aclarar que él no es el anónimo autor del coro 'cocherito leré'

cvalqui said...

Haya o no Haya, el Poeta será.
A mas calumnias, más Orellanismo.
Mas cuetes no le puedo reventar al Ilustre, que despees nos abandonará.

Aldo said...

Sorpresiva e inesperada la reciente entrada del Poeta, entendible y justificado el tono ácido de su mensaje, reacción normal de aquel que se siente atacado.

Lamentable situación sí partimos del principio que la razón primordial del blog era de reconectarnos y solidificar una amistad de casi toda la vida.

Los dejo con una interrogante, uno escoge a los amigos, o los amigos lo escogen a uno ?

En mi criterio, ninguna de las dos opciones, la amistad nace en forma natural, espontánea, con el tiempo se va consolidando; no se divide por asuntos de religion ni ideologia.

Que tengan in buen dia.

Moshe said...

Comparto el juicio de Barbie Vittorio y lamento el tono amargo y resentido del otrora tesorero de la promoción.

La vida determina el camino de unos y otros, afirma este sobrio hebreo mientras desayuna Belvedere con leche. Salud por eso.

Afirma que solo tratamos banalidades y que verdaderos blogs son los que alguna vez creó (y abandonó): Deustuanos '68, Sexalescentes, entre otros. La modestia de siempre no lo abandona.

De cualquier modo, lo saludo como viejo amigo y le reitero que esta casa está abierta a todos. Aunque no lo vea en mi siguiente viaje a Lima, recuerdo que asistimos al mismo colegio.

Carlos Orellana said...

Esta es un post del 25 de abril de 2010. Se puede constatar la forma elegante y educada como empezó el blog :

La foto que ven muestra a Manolo Pedreschi y su esposa en la isla de Bali, Indonesia. Ellos estaban de viaje. La familia Pedreschi vive en Nueva Zelandia. No sé hace cuánto tiempo se fue del Perú -ya nos lo dirá, pues ha prometido escribir algunas notas- , pero fue hace mucho, pues Manolo ya está firmemente establecido en la hermosa y apacible Wellington. Como nos escribimos de tanto en tanto, sé que ya se ha jubilado como funcionario de la poderosa corporación IBM con sede en Wellington, y ahora, según propia confesión dedica su tiempo a coleccionar botellas de vino para su respetable cava, a beber de vez en cuando notables cepas y a leer. Pedreschi es un gran aficionado a la lectura y no pocas veces nos hemos enfrascado en discusiones bizantinas -que son las mejores- sobre autores contemporáneos.
Me olvidaba -y eso sí debe promover la envidia de todos nosotros- ahora que se ha jubilado se dedica a pasear por el mundo con su esposa en uno de esos lujosos cruceros que tocan rutas de sueño. Me contaba hace unos meses que iba a estar por Grecia. Espero que nos hable de su límpido cielo, de las islas griegas, la ruta de Ulises, y del vino Retsina.
Como podrán apreciar, la belleza de la señora opaca a Manolo, quien pese a todo ha podido conservarse algo joven gracias al vino neozelandes. Tiene, me parece, dos hijos. Cuando lo visité -hace ya unos 12 o 13 años- conocí a uno de los chicos: me espanté al verlo pues era igualito a él; creí por unos momentos estar en la Lima de 1966, en Breña y en el patio del Colegio Alejandro O. Deustua.

Moshe said...

Y siguió de esta manera:

UN JUDIO EN WELLINGTON

Estaban 3 mujeres y Manuel Pedreschi frente a la Catedral de St. Paul a las 2 de la mañana. Pasa un patrullero y se lleva a los cuatro... por hacer escándalos en plena vía publica. Al llegar a la delegación, les preguntan a cada uno de ellos:
- Nombre, nacionalidad y ocupación... -
- Laura López, panameña secretaria... -
- María González, colombiana organizadora de eventos... -
- Claudia Pérez, dominicana ama de casa... -

Y entonces interrumpe Pedreschi y dice:
- ¡Ahhh, que bien!... Ahora resulta que ¡la puta soy yo! - Me quiero morir...!

cvalqui said...

Hay un amor a prueba de todo, entre el Judío y el Poeta, esto no tiene dudas. Bienvenido Poeta. Mi persona a pesar de mis defectos y comportamiento pueril, lo estima y aprecia, porque fue testigo de mi época de adolescente, en el colegio. Un recuerdo inolvidable. Gracias Poeta, por su amistad a este ignaro servidor.