22 January 2014

Regla de oro

Regla de oro que sigue vigente.

Viene desde Varela y llegó hasta el piso 7 de un exquisito penthouse en San Borja.

5 comments:

Moshe said...

Todo esto me hace acordar al quetejedi, veraz, derecho, trabajador, y buen amigo nuestro.

Mario Pablo said...

Si el trabajo da salud que trabajen los enfermos, así dicen los devotos del pijama y de la almohada, aunque parece que por algún designio divino los veteranos ya no estamos en condiciones de flojear porque, cual perro viejo, nos levantamos tempranísimo y jateamos en cualquier momento y sitio, eso me ocurre ¿a Uds. no?, pajizos de coronilla

Aldo said...

Me lo imagino a Chaplita, cabezeando a su regalado gusto el el último asiento de la combi, claro, despues pagando caro por la sesión de pestaña y caminando las cinco paradas que se pasó.

En mi caso, los fines de semana a golpe de tres, me siento frente al televisor, o a leer una revista, y me doy una jateada que para que les cuento, tan profunda que cuando despierto pienso que es hora del desayuno.

Moshe said...

Al igual que Aldo durante el fin de semana tomo una breve siesta a media tarde. Ya el cuerpo no es el mismo, carajo.

A no ser que uno sea Cajón, Doc Moreno, Frente de mula o COQcutre.

cvalqui said...

En mi caso, los fines de semana, sábado al mediodía me doy una siesta de la PM, el domingo con mis hijos, parejas y nietos nos vamos a Mamacona, al Club del Banco de la Nación, estamos en la piscina, hacemos parrillada y nos relajamos para que les cuento. Cojon me queda chico, a pesar que me deleita, con sus improvisaciones, un personaje de aquellos. Moshe te extraña Cojon, te ha soñado que en Breña se va a reencontrar contigo, muy pronto.