Moshe, si no la ha dejado sin tetas es porque la faltó tiempo, por eso la musulmana lo busca desesperadamente, Moshe eres grande, mi reconocimiento a tantos argumentos expuestos.
Moshe, Cojon y el arquitecto te espéramos por el Perú, cuando amenazas venir, para ir a comer chicharrones con su sildenafilo, y sus respectivas bebidas espirituosas. Para referencia tienes a Aldo, quien estuvo con nosotros, la oportunidad que vino.
A ordeñar, ordeñar, que el mundo se va a acabar. Todos los jeretos hemos puesto el ojo en semejantes bollos y desearíamos incrustarnos en ese pechereque; infelizmente se trata sólo de una foto y el paso de la imaginación al hecho es más difícil que sostenerse asidos de un clavo incandescente, aunque si vemos bien las cosas, el pendex de Tenorio se agenciaría primero de unos guantes como los que usan los de la empresa de electricidad para manipular las cajas generales.
Como bien dice Carlitros, reencontrarme con el, con el Oso Delgado, y con el entrañable Cajón (que ahora me haya borrado de su testamento) pero igual se le quiere, fue algo muy especial.
Al Arquitecto Yeren lo vi después en la reunión del Real Club, fue un emotivo reencuentro.
Pirincho, no dejes enfriar los chicharrones, ponle fecha a tu boleto y agarra tus chivas rumbo a Lima.
Un reciente artículo en El Comercio informaba que un moreno enjuició al hospital Loayza, alegando que luego de que su esposa fuera sometida a una operación en dicho hospital, había perdido por completo el interés en el sexo.
Un vocero del hospital contestó: “Estimado Señor Picaflor: Su esposa fue admitida en Oftalmología, todo lo que hicimos fue corregirle la miopía.”
14 comments:
Esta musulmana busca a Moshe, para que repare sus destrozos. Bien Moshe.
Naca la pirinaca. A la susodicha la vieron por Washington, D.C.
Pirincho, no seas timido, Mossad tiene fotos donde se te ve prendido de la musulmana lactando como buen infante.
Nada de nada. Por mi madre que soy tan inocente como el marionetero Doctor Vladimiro.
Moshe, si no la ha dejado sin tetas es porque la faltó tiempo, por eso la musulmana lo busca desesperadamente, Moshe eres grande, mi reconocimiento a tantos argumentos expuestos.
Me parece que la hembra esta buscando al arquitecto pesquero Yiriiiiin.
Al Arquitecto ahora se hace llamar Príncipe Azul (puro Sildenafilo).
El arquitecto, no para de usar su sildenafilo, no le interesa que le de un paro cardiaco en plena faena; al final muere en su Ley, TIESO y RIGIDO.
Moshe, Cojon y el arquitecto te espéramos por el Perú, cuando amenazas venir, para ir a comer chicharrones con su sildenafilo, y sus respectivas bebidas espirituosas. Para referencia tienes a Aldo, quien estuvo con nosotros, la oportunidad que vino.
No tengo fecha de viaje, Carlitros. Ademas estoy desmoralizado desde que COQcutre me borró de su lista de amigos. Lloro inconsolablemente.
A ordeñar, ordeñar, que el mundo se va a acabar. Todos los jeretos hemos puesto el ojo en semejantes bollos y desearíamos incrustarnos en ese pechereque; infelizmente se trata sólo de una foto y el paso de la imaginación al hecho es más difícil que sostenerse asidos de un clavo incandescente, aunque si vemos bien las cosas, el pendex de Tenorio se agenciaría primero de unos guantes como los que usan los de la empresa de electricidad para manipular las cajas generales.
Como bien dice Carlitros, reencontrarme con el, con el Oso Delgado, y con el entrañable Cajón (que ahora me haya borrado de su testamento) pero igual se le quiere, fue algo muy especial.
Al Arquitecto Yeren lo vi después en la reunión del Real Club, fue un emotivo reencuentro.
Pirincho, no dejes enfriar los chicharrones, ponle fecha a tu boleto y agarra tus chivas rumbo a Lima.
Me agrego a la lista de los desheredados por el inefable Cajón, quien no responde a e-mail alguno y me los devuelve al toque.
Un reciente artículo en El Comercio informaba que un moreno enjuició al hospital Loayza, alegando que luego de que su esposa fuera sometida a una operación en dicho hospital, había perdido por completo el interés en el sexo.
Un vocero del hospital contestó:
“Estimado Señor Picaflor: Su esposa fue admitida en Oftalmología, todo lo que hicimos fue corregirle la miopía.”
Post a Comment